«Voy a por unas palomitas, que esto promete», me digo. Apenas hacen falta seis páginas de ‘Viuda Negra: La más buscada de SHIELD‘ (Panini Cómics) para darse cuenta de que uno se enfrenta a una dosis entretenimiento en vena. Natasha Romanoff salta al vacío desde el Helitransporte de la agencia de seguridad marvelita, y el lector se tira con ella de cabeza. A dónde haga falta, que ya se ve que la piscina está llena. Mark Waid y Chris Samne – con colores de Mathew Wilson-, el equipo creativo que ya cosechó múltiples elogios por su Daredevil -y que este humilde escribiente no ha leído, cosa de lo que se lamenta mucho- arman en este título un cómic de espías de aúpa.

JPage Low-Res PDF

 

«Los sueños son para los débiles. Iosef, dame un café». Natasha no se anda con chiquitas. Alguien se la ha jugado y la ha obligado a traicionar a SHIELD. Así que la agencia de seguridad más helitransportada de la historia de los tebeos lanza una orden unívoca: Natasha Romanoff, alias Viuda Negra, pasa a ser enemiga de SHIELD y debe ser capturada. Comienza así una caza a la espía que vino del frío; un juego del ratón y el gato en el que la pelirroja a veces será presa y otras depredadora. De por medio, hará una visita a su traumático pasado y se cruzará con Iron Man. Y de paso, destilará carisma a cada viñeta y demostrará que la simpatía es una cualidad muy sobrevalorada.

viuda negra

‘Viuda Negra: La más buscada de SHIELD’ acumula toneladas de dinamismo, sí, pero apiladas con el mayor de los tinos. Espectaculares escenas de persecución se alternan con otras repletas de tensión, intriga o drama. Saltos. Miradas. Puñetazos. Recuerdos. Explosiones. Tazas de café. El resultado es un ‘blockbuster’ muy capaz de congregar la extraña unanimidad de palomiteros y críticos de antiparras caídas. Se le pueden sacar algún pero, como que el antagonista no está a la altura de la chulería de la Viuda, o que los lectores veteranos quizás ya han visto esto mismo en anteriores capítulos. Detalles nimios si se llega a este tebeo con ganas de disfrutar de la función que promete su portada.

Esta Viuda Negra es puro ritmo. Será rusa, pero Natasha es nombre de tango. Con lo que apunta en este primer volumen, la invitación para seguir bailando es difícil de rechazar.

img_20170604_103314881